Un nuevo hecho de violencia sexual ha sacudido a la comunidad de Sanandita, ubicada en el municipio de Yacuiba, Tarija. Una niña de 14 años fue víctima de violación agravada presuntamente por parte de un militar instructor de la Escuela de Cóndores del Ejército Boliviano (Esconbol). El acusado fue identificado como el sargento primero F.E.Z. destinado a la unidad militar.

La agresión ocurrió la tarde del lunes 28 de julio, entre las 16:30 y 17:00 horas, cuando la menor se encontraba sola en su vivienda porque sus padres salieron a trabajar. Así recoge el informe de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv)

Fue la propia niña que contó el abusó que sufrió a una prima, con quien se dirigió al puesto donde trabaja su madre para dar la voz de alerta. La progenitora, de inmediato, acudió a la Esconbol y puso en conocimiento del hecho a las autoridades militares.

Según el coronel Mirko Bustos, comandante de Frontera Policial, personal de la Felcv se constituyó hasta la unidad militar tras recibir la denuncia para verificar el caso. En ese momento, el acusado estaba al interior del recinto militar, pero salió a requerimiento policial en medio de la indignación de los vecinos. Estos procedieron a agredirlo antes de que fuera arrestado y trasladado a dependencias policiales de Yacuiba. Al cierra de esta redacción se hallaba bajo custodia y a la espera de su audiencia cautelar.

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Comunarios de Sanandita marcharon por las calles de Yacuiba

Durante la investigación preliminar, se realizaron diligencias como la recolección de ropa interior, sábanas del lugar donde se habría producido la agresión, declaraciones de testigos y toma biológica del sindicado.

La noticia generó una inmediata reacción en Sanandita. Este miércoles, comunarios marcharon por las calles de Yacuiba hasta la Casa de la Justicia, exigiendo sanción contra el acusado. También denunciaron un patrón de abusos que, según ellos, se arrastra desde hace años.

“Es la primera vez que se denuncia, pero estos casos han ocurrido siempre, año tras año, y nunca fueron visibilizados”, expresó Carlos Alberto, padre de la víctima. “Ese hombre llegó recién. Nadie lo conocía. Aprovechó su uniforme y cometió este crimen. Exigimos justicia sin privilegios”.

“Hemos aguantado durante mucho tiempo”; Así comenzó su declaración Roberto Carlos Torrez, capitán comunal guaraní de Sanandita, visiblemente afectado por el caso, pero firme en su denuncia.

El líder comunal expresó el sentir colectivo de su pueblo con palabras cargadas de indignación. “Levantamos la voz como autoridades comunales porque estamos profundamente indignados con lo que ha sucedido. Esta vez vamos a hablar, vamos a gritar por justicia. Tenemos todo el derecho de protestar y de exigir que la ley se cumpla como corresponde. Ya no más abusos, ya no más impunidad”, aseveró.

Según declaró el capitán comunal, son varios años que abusos como estos se han venido cometiendo por parte de uniformados destinados a la Esconbol. Piden acabar con ellos.

FUENTE: EL DEBER

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