A todos nos puede pasar.
Estamos fuera de casa entretenidos, descuidamos por un rato el celular y cuando revisamos el bolsillo, el bolso o donde lo teníamos colocado ya no está allí.
Los ladrones pueden ser muy habilidosos a la hora de robarnos celulares en un momento mínimo de descuido.
Además de hacernos sentir mal, el robo de un celular puede comprometer documentos privados y datos personales y originarnos un agujero en nuestros ahorros a la hora de reemplazarlo.
Por eso te ofrecemos algunas indicaciones sobre qué hacer para evitar daños mayores en caso de que sufras un robo de tu teléfono móvil.